miércoles, 10 de mayo de 2017

Cartas - Estrenando el cuaderno de campo


Al llegar la primavera, muchas escuelas organizan excursiones a la sierra y pueden aprovechar la ocasión para explicar qué es un cuaderno de campo y que los niños empiecen uno. 

He enviado al cole de Roquetas de Mar una caja con diverso material y tres cartas. En ellas pido colaboración a los alumnos aficionados a las aves y a las plantas para que expliquen a los demás qué es cada cosa. (No olvidéis que estos niños existen realmente)


En la entrada «Un mundo por descubrir» tenéis un relato y, a continuación, las cartas dirigidas a los alumnos, solo os falta buscar una caja y llenarla con unos cuadernos o «libretas excursionistas», fotos de animales y plantas y algún material natural. Seguramente, mis cartas no os servirán porque no hallaréis las mismas cosas, pero ahí está la idea. 

Procurad comentar algo que les llame la curiosidad, que les incite a investigar. Meted las cartas en sobres, cerradlas y dirigidlas a ellos. No hay nada como recibir una carta y abrirla. Hacedles sentir que su misión es importante.  

Plumas de: 2 cernícalo, picapinos, chotacabras, busardo ratonero, milano real
 
En Abejar, a ocho de mayo de 2017


¡Hola, Víctor! ¡Hola, Susi!:
¿Qué tal estáis? Soy María, la escritora de las aventuras del Comando Lobo.
Os he enviado una cajita con algunas cosas que he encontrado en la sierra para que empecéis vuestros cuadernos de campo. Ya sabes que los Agentes Especiales de Protección de la Naturaleza llevan una libretita en la que anotan las cosas interesantes que se encuentran.
Como sé que os gustan mucho las aves he metido unas plumas. Las más grandes son de cigüeña, luego hay un paquetito con plumas de paloma bravía, otro con plumas de urraca y un tercero con plumas de cernícalo, picapinos, chotacabras, busardo ratonero y milano real. El busardo y el milano son águilas; el cernícalo, un pequeño halcón.
Algunas de estas plumas se les habrán caído a los pájaros durante la muda que es cuando renuevan el plumaje, pero las de urraca las recogí todas bajo un árbol. Eso significa que un águila la cazó y la desplumó sobre una rama. Las de paloma las encontré en el pueblo, así que seguramente, se la merendó un gato.
Fijaos en que tienen diferentes formas y tamaños según en qué parte del cuerpo estén. Son muy importantes para los pájaros porque les permiten volar y les protegen del frío y del calor. Pensad que los pájaros no viven dentro de una casa y tienen que aguantar la lluvia, la nieve, el viento y el calor. Sin plumas se morirían.
Ahora podéis investigar como son las palomas bravías y las urracas. A las urracas les gusta adornar sus nidos con cosas de colorines. Son unos pájaros la mar de inteligentes, si encuentran mucha comida, la entierran en diferentes sitios para zampársela cuando no haya nada. Y si una urraca ve que otra espía donde ha escondido su comida, luego la cambia de lugar para que no se la robe. Ja, ja, ja… ¡qué listas son!
Las palomas bravías son muy buenas volando y esquivando a las águilas, por eso se llaman bravías (bravas). En mi pueblo viven en los huecos del tejado de la iglesia y en alguna casa abandonada. Cuando llega el milano real o el milano negro levantan el vuelo en una bandada fantástica, se dan una vueltecita y otra vez al tejado.
En el campanario de la iglesia hay tres nidos de cigüeñas. ¿Sabéis que un nido de cigüeña pesa tanto como un coche pequeño? ¡Uff, espero que no me caiga nunca encima! Es normal que sean nidos muy grandes porque las cigüeñas también lo son: pesan entre 2.5 y 4.5 kg y pueden llegar a medir 125 cm de alto, 115 cm de largo y sus alas abiertas miden 215 cm. ¿Cuánto medís vosotros de alto? Decidme la verdad, ¿la cigüeña os gana? Si es así, no será por mucho tiempo, seguro que pronto dais un estirón y se queda más bajita que vosotros.
Por favor, Víctor y Susi, encargaos de explicar o de leer estas cosas al resto de Agentes Especiales para que también ellos sepan algo de aves. Repartid las plumas de paloma y de urraca entre vuestros compañeros. Gracias por vuestra colaboración.
Os mando un gran abrazo o, mejor, un aleteo de milano.
María – Milano Negro



¿A qué la lavanda huele de maravilla? ¿Cuántos perfumes llevan su esencia?


En Abejar, a ocho de mayo de 2017


¡Hola, Jaime!:
¿Qué tal te va? Una pajarita que se llama Cristina me ha dicho que te encantan las plantas y que cuidas, por lo menos, quince. A mí, también, me gustan mucho. ¿Puedes hacer algo por mí? Os he enviado una caja con algunas cosas para que podáis estrenar vuestro cuaderno de campo de Agente Especial del Comando Lobo.
Ya sabes que algunos vegetales son comestibles, otros son medicinales, pero seguro que también sabes que hay unos cuantos muy venenosos. Estaba dudando entre enviarlos o no, pero después he pensado que sois Agentes Especiales y que necesitáis conocer estas plantas peligrosas. ¿Puedo confiar en ti para que se lo expliques a tus compañeros?
El eléboro, el muérdago y la cicuta son tóxicos, jamás comáis las bolitas del muérdago, ni confundáis la cicuta con el perejil aunque las hojas sean tan parecidas. Verás también una ramita de acebo con sus bolitas rojas. Esta planta está protegida y no puede cogerse porque muchas aves en peligro de extinción se alimentan de ella como el urogallo.  Yo la he cortado de un jardín, no de un acebal (bosque de acebos).
El enebro es esa tan pinchosa con bolitas verdes, que al madurar se vuelven negras. Las bolitas se llaman enebrinas y se utilizan para aromatizar comidas y algunos licores como la ginebra.
He puesto romero y tomillo para que aprendáis a diferenciarlos. Ambos tienen propiedades medicinales y se utilizan en la cocina porque dan muy buen sabor a las carnes.
Jaime, dales a César* y a Isabella* el tomillo, el romero, el eléboro y la cicuta para que los huelan y os expliquen cómo es el aroma: agradable, apestoso, fresco, delicado… Chafad una enebrina y oled, ya veréis qué sorpresa. Después que toquen las hojas de roble secas y las que acaban de salir esta primavera. ¿A que las nuevas son suaves como un peluche? En cambio, las del enebro y el acebo, ¡cómo pinchan!
Reparte una hoja de roble a cada uno de tus compañeros. Podéis investigar cómo es un roble, ya veréis qué copa tan bonita, grande y redonda. Y su fruto, ¿sabéis cuál es y quién se lo come? Y con su madera, ¿qué se hace? ¿Cómo se llama un bosque de robles?
Y por último, verás una cosa muy rara como peluchosa. No es una criatura marciana, tranquilo, pero es algo especial: se llama liquen y está formado por un hongo, un alga y una levadura. ¿A que es raro?
Forman una asociación que se llama simbiosis. Ya sé que «simbiosis» es una palabra extraña, pero los Agentes Especiales conocen palabras especiales, ¿no? Es sencillo: «simbiosis» significa que el hongo, el alga y la levadura son superamigos y han decidido vivir juntos para ayudarse y poder sobrevivir en lugares que no les son del todo favorables.
Aunque miréis muy bien al liquen no veréis ni los hongos ni las algas porque son microscópicos y solo se pueden ver con un microscopio. Vive sobre los árboles y las piedras en lugares húmedos y cuando cubren mucho los árboles parece como si el bosque fuera un lugar misterioso y embrujado. Pero nada de eso, solo son líquenes tan contentos de vivir sobre un roble.
Bueno, Jaime. Seguro que ya se te habrán ocurrido un montón de cosas para investigar sobre estas plantitas, ¿verdad? Ya me lo imaginaba, ja, ja, ja.
Por favor, cuando terminéis de examinar y dibujar las plantas tóxicas, dáselas a la señorita Cristina para que se las lleve. Confío en ti. Es importante que no se queden por ahí y que nadie se coma una bolita pensando que es una chuchería. Con estas plantas solo pueden trabajar los Agentes Especiales. Gracias por tu ayuda.
Un fuerte abrazo.
María – Milano Negro
* Isabella y César son invidentes

El tritón jaspeado no es un ingrediente para pociones de brujería.

En Abejar, a ocho de mayo de 2017


¡Hola, Susana! ¡Hola, Laia!:
¿Qué tal, chicas? A ver si podéis ayudarme con las cositas de la caja que os he enviado.
Os he metido unas piñas chiquitinas la mar de bonitas y otras grandotas. Las piñitas son de pino albar y ya no crecen más, las más grandes son de pino negral, y también sus hojas, que se llaman acículas, son más largas. Supongo que por Almería habrá pino piñonero, y si tuviéramos una piña, veríais que todavía es mayor que la del pino negral.
Un  buen Agente Especial del Comando Lobo sabe rastrear por las huellas y también por otros indicios/señales que dejan los animales. En una bolsa encontraréis piñas mordidas. ¿Viéndolas sabríais quién se las ha comido? Es fácil: las que estás roídas dejando hilos, se las ha comido una ardilla; si estuvieran comidas sin dejar hilos, habría sido un ratón. El ratón empezaría mordiendo un ladito porque no tiene unas manos tan hábiles como las de la ardilla. Ella va comiendo y dando la vuelta a la piña y solo deja el copete.
Hay otras piñas que tienen las escamas como rotas, esas las han abierto los pájaros picapinos y el piquituerto para comerse los piñones. Los piñones del pino albar y del pino negral no son como los piñones del pino piñonero que son los que nos comemos las personas. Os he dejado unos piñones en un papelito. Por cierto, un bosque de pinos se llama pinar.
A veces, parece que las piñas tengan magia porque se abren y se cierran ellas solitas. Cuando se mojan, se cierran; y al secarse, se abren otra vez. Curioso, ¿verdad? Meted una piña en agua y ya veréis cómo está al día siguiente, luego dejadla al sol durante unos días para que se seque y volverá a abrirse.
¿Qué más he metido en la caja? ¡Ah, sí! Unos cuernos de corzo. A los corzos, los ciervos, los alces y los renos cada año les crecen unos cuernos que les sirven pelear entre ellos. Las hembras escogen al macho que gana las peleas y que tiene la cornamenta más espectacular. Los jóvenes tienen unos cuernos con menos puntas.
Al llegar el invierno esos cuernos se caen y es cuando mi perro se los encuentra y viene tan contento pensando que se ha encontrado un hueso para comer. Ja, ja, ja. Mi husky está muy loco.
Bueno, él se encuentra cuernos de corzo y yo, fósiles. Un fósil es una planta o un animal que se quedó atrapado entre el barro hace muchos millones de años y se convertió en piedra (petrificó). Os envío fósiles en los que se ven marcas de almejas. ¿Serían de la misma época que los dinosaurios?  Yo no me imagino a un dino comiendo almejitas… no sé qué pensar…
Por favor, regalad una piñita de pino albar a cada compañero de clase, las otras dejadlas en la caja en clase para que podáis verlas todos.
No os olvidéis de dibujarlas en vuestro cuaderno de campo y de apuntar de qué pino es cada una.
Me encantaría que me escribierais y me contarais todo lo que habéis hecho y si os gusta que os envíe cosas de Soria. Gracias por vuestra ayuda.
Abrazos y más abrazos
María – Milano Negro

Óxido de manganeso. Parece el fósil de una planta, pero no lo es.

2 comentarios:

  1. Hola María qué cartas más estupendas, eres toda una agente medioambiente y tú través
    Trabajo educativo es impecable y ya sabes que se de lo que hablo. Trabajé con niños mudos y fue super divertido, las limitaciones hacen que niños adquieran una increíble sensibilidad. Un abrazo grande

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    1. Hola, Emerencia. Gracias por tus palabras.
      Ya sabes que estos niños existen en realidad y hay dos que son invidentes. Es necesario integrar a todos, no importa lo diferentes que sean, al contrario, las diferencias unidas logran que se llegue más lejos de lo que llegarían si todos fueran iguales.
      Son los dos niños ciegos quienes escuchan el aullido, y gracias a ellos, encuentran al lobo en el primer cuento.
      Besos.

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